Estos son los primeros momentos de vida de nuestra hija, bajo la observación de la partera y su asistente, quien tomaba nota de peso, medidas y Examen de Apgar apenas se produjo su llegada al mundo.
Una vez verificado que todo se encontraba bien, hicimos el contacto piel con piel en una mecedora en la misma sala de parto durante un buen rato, mientras allí se recuperaba Anna, la gestante de nuestra bebé, bajo el cuidado de los médicos y enfermeras.
Al rato, una enfermera nos acompañó a nuestra sala de internación y nos asistió en los primeros momentos allí, mientras Anna permanecía un tiempo más en la sala de parto y luego la acompañaban a su sala de internación.
De ahí en más, recibimos la visita periódica de la puericultora, de la neonatóloga y de las enfermeras para realizar controles de rutina, estudios médicos y vacunación, así como asesorarnos en lo que pudiéramos necesitar.
Nuestra estadía en la clínica desde el nacimiento fue de dos noches y poco menos de dos días, el mismo tiempo que permaneció internada Anna: todos recibimos el alta al mismo tiempo.
Al alta, nos entregaron un informe médico en ucraniano, traducido luego al español por nuestra coordinadora del centro de subrogación, con todos los detalles del parto y evaluación del recién nacido, así como su evolución durante sus dos primeros días y los controles realizados. El informe también incluye los nombres de los médicos a cargo.
Les cuento pronto acerca de estudios adicionales y vacunación, pasos importantes una vez nacida nuestra bebé en Ucrania gracias a la técnica de gestación subrogada.
💜💜💜💜💜