Llegó el gran día: ese momento que tanto soñamos.
Primero, el mensaje de Anna y luego el llamado de nuestra coordinadora: el trabajo de parto estaba comenzando.
A los pocos minutos, uno de los conductores del centro de subrogación pasaba por el departamento y me llevaba a la clínica de maternidad, adonde en ese momento estaban conduciendo a Anna y donde me esperaba uno de los dos momentos más emocionantes de mi vida: la llegada de nuestra hija.
Como los menores de seis años no están autorizados a ingresar a la maternidad en Kyiv, Ucrania, al menos en tiempos de pandemia, el flamante papá se quedó en casa cuidando al hermano mayor. Nuestro plan inicial era viajar acompañados por los cuatro abuelos, como lo habíamos hecho en nuestro primer proceso de gestación subrogada en Ucrania para recibir a nuestro primer hijo, pero dado el contexto mundial y el hecho de que los abuelos aún no habían recibido sus vacunas contra el Covid19, viajamos solamente nosotros tres.
Llegamos a la clínica por la noche y allí me esperaba una enfermera para entregarme todo el kit de barbijo, bata, cofia y fundas de calzado quirúrgicas para ingresar a la sala de parto.
La emoción apenas me permitió registrar las imágenes que les muestro en el video, las primeras al llegar por la noche y algunas durante el día, más cerca del gran momento. La sala de partos era enorme, muy bien equipada y luminosa, algo no muy común en la Argentina, donde suelen ser cerradas o en subsuelos.
Allí nos esperaba una noche de preparación y monitoreos, para que con un maravilloso sol de invierno, pasado el mediodía llegara nuestra pequeña, llena de salud y vitalidad. Cortar su cordón umbilical fue uno de los momentos más mágicos que me tocó vivir, tras ser testigo privilegiada del milagro de la vida, el admirable trabajo del equipo médico de la maternidad y la increíble entrega de Anna, el ángel de nuestra historia.
Luego me tocaría acompañar la valoración general de nuestra bebé y el ansiado contacto piel con piel, como estar soñando despierta...
Pronto les cuento y muestro más de nuestro paso por la maternidad.
qué emoción!!!!!